NAYLAMP NAYLAMP NAYLAMP NAYLAMP Cuentan las leyendas que en tiempos remotos, mucho antes de que el Imperio Inca se expandiera y gobernaran otras tierras remotas y regiones alejadas de su antigua Cuzco, existían diversas culturas y pueblos con sus creencias propias como
los Chimú, los Mochica o la cultura Labayenque. De acuerdo a relatos recogidos por los cronistas Naylamp (personaje mitológico del Antiguo Perú) provino del mar, trayendo la civilización a las tierras lambayecanas (norte del Perú), donde fundó un reino. Proveniente del sur y al
frente de una flota de balsas, Naylamp llegó a las costas lambayecanas. Le acompañaba un séquito de funcionarios, versados en diferentes artes y oficios, así como su esposa Ceterni y varias concubinas. Se adentró unos kilometros de la costa, donde construyó un templo, al que puso el
nombre de Chot y en el colocó un ídolo de jade verde al que llamó Yampallec. De allí provendría el nombre de Lambayeque dado a la región. Dicho ídolo representaba al mismo Naylamp. En el arte precolombino a Naylamp sele representa con rasgos antropomorfos y zoomorfos
combindos. Su nombre significa en lengua moche, ave o gallina de agua. Naylamp dicen que sería el fundador del legendario Reino Sicán o Lambayeque en el siglo IX d.C. y al morir fue divinizado por sus hijos. Estos contaron que Naylamp era inmortal y que decidió convertirse en ave, regresando a su lugar de origen.
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